Menos de 100 minutos en los
que David Barrett nos cuenta esta historia de bomberos y policías. Para ello
cuenta con artistas del celuloide como Josh Duhamel, Rosario Dawson, Bruce
Willis y el rapero 50 cent.
Un bombero se encuentra en
un supermercado de la ciudad cuando tres hombres blancos armados entran y
asesinan a padre e hijo negros y propietarios del negocio. Él consigue escapar
y tras narrar lo sucedido a los agentes de la ley e identificar al asesino en
una rueda de reconocimiento, es integrado en un programa de protección de
testigos que le lleva a cambiar de vida en otra ciudad durante un tiempo. Pero
al igual que no se ha olvidado de los asesinos de sus amigos, ellos tampoco se
han olvidado de él.
No puede ser catalogado como
gran film pero la historia no es nada mala. Jóvenes protagonistas en alza y un
Bruce Willis que en esta ocasión se viene a menos.
NOTA: 8
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