Jeff Bridges como
protagonista principal y Maggie Gyllenhall y Colin Farell como secundarios
tienen la misión de llevarnos al corazón de la música country y sus entresijos.
Una ex estrella de dicho
género musical ha pasado de llenar estadios a actuar en locales de alterne y
bares americanos de carretera.
Solo y apesadumbrado se
refugia, como suele ser habitual en los vicios menos sanos, en este caso,
sobretodo el alcohol.
Dos personas intentarán
relanzar la carrera artística de este ex afamado cantante, por un lado su
pupilo más aventajado y por otro una reportera con quien tendrá algo más que
una simple entrevista.
La decadencia de las
estrellas que han llegado a lo más alto y la lección de que hay que aprovechar
las cosas cuando se tienen, es la temática que se ofrece de buenas maneras en
esta obra.
NOTA: 7
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