El director
francés Pascal Laugier lleva la batuta en este film canadiense de 115 minutos
del que también es guionista. Jessica Biel es la actriz más reconocible del
reparto.
En un típico
pueblo de Estados Unidos de cuyo nombre no quiero acordarme, empiezan a ocurrir
una sucesión de desapariciones de niños entre los vecinos. Con una población
preocupada por este motivo y atravesando una crisis debido al cierre de una
mina, una doctora vive en su casa con su hijo y una niñera. Una noche y tras la
cena cae rendida en brazos de Morfeo. Se despierta sobresaltada por ciertos
ruidos en su casa, descubriendo a posteriori que la siguiente víctima del
secuestrador está siendo su vástago.
Rara. La
verdad es que es una película un tanto rara, pero debido a su giro argumental
merece al menos este comentario. Empieza lenta, todo sea dicho, mas poco
después vas entrando en la trama y en cierto modo, el desconcierto que te
produce la sucesión de acontecimientos te anima a seguir viéndola. Quizá un
mejor final habría hecho que la puntuación fuera mayor.
NOTA: 5
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