Buen film
estadounidense dirigido por Clint Eastwood y con Bradley Cooper en el papel del
protagonista. Sienna Miller, Luke Grimes y Jake McDorman entre otros le
acompañan en los créditos como actores principales.
Biopic de Christopher
Scott Kyle, militar perteneciente a los SEAL de la Armada de los Estados
Unidos, famoso por ser el francotirador más letal de la historia del país de
las barras y estrellas. Este tejano aficionado a los rodeos se alistó a la
Marina y más concretamente a los Navy Seals a finales de los años 90.
En el film se
mezclan aspectos de su vida militar así como facetas más privadas y familiares
haciendo énfasis en sus misiones por tierras irakies en la compañía Charlie
donde llegó a ser apodado “la leyenda” por ser uno de los soldados más certeros
con los insurgentes del lugar. Admirado por sus compañeros y compatriotas y
odiado y temido por sus enemigos.
Película
marcadamente patriótica como suele ser costumbre en las obras de Eastwood y que
tanto suele gustar a la Academia del cine americano encargada de fallar los
premios Oscar. La bandera de los Estados Unidos aparece innumerables veces a lo
largo de los 132 minutos de metraje. Algo impensable en otros países. Doblaje
al castellano perfecto. Si eres aficionado a los videojuegos bélicos en primera
persona habrá escenas que te recuerden a ello.
NOTA: 8
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